jueves, 26 de abril de 2007

Felicidades a los tepindroganadores.

Felicidades a los Tepindros ganadores. Digan lo que digan, arriba están los que más se lo han currado y los que más manejo de estas tecnologias tienen.
Lo dicho, felicidades de verdad.

miércoles, 18 de abril de 2007

Se abre el telón y aparece un periodista convertido en cómico, aunque no se sabe muy bien el momento de la transformación; ¿Fue con los monólogos del Club de Flo? o ¿el Señor Urdaci ya tenía gracia de antes? No sé, pero me sorprendió verlo anoche en la entrevista al presidente Zapatero en Antena 3 con dos periodistas de verdad al lado ¿Es qué se le han terminado los chistes?, si para hacerlos no hay que tener credibilidad ¿O sí, y ese es el problema?

domingo, 15 de abril de 2007

Última hora en Nerpio

Listas del PSOE para las municipales:

1ºPilar Peña Beteta
2ºEmilio Gómez López
3ºIsabel Moreno Rojano
4ºRaimundo García Martínez
5ºJuan Pedro Martínez Sánchez
6ºMaria Amador López
7ºTeresa Valero Gómez
8ºYolanda Beteta Fernández
9ºTomás Nova García
Suplentes:
10ºÁngel Plasencia Plasencia
11ºMartín Nieto Peréz
12ºMiguel Ángel Gómez González.

PD: Si hay alguien interesado en que también aparezcan las del PP y me las facilita también las pùblicaré. Mi dirección de correo es: sisi_nerpio@hotmail.com

sábado, 14 de abril de 2007




Las Fiestas de la Virgen de la Cabeza en Nerpio este año coinciden con el fin de semana del puente de mayo. El 28 y 29 de abril. Además, habrá algunos cambios, ya que el sabado por la noche, si el tiempo acompaña, se celebrará una verbena en la Plaza Mayor.
Vamos a pasar lista, ¡Que no falte nadie!
















miércoles, 11 de abril de 2007

Atentado en Argel

Y de repente uno siente verguenza de pertenecer a la condición humana, es sólo un instante pero dura demasiado. Matar a un individuo es cometer un asesinato pero matar a una treintena no tiene nombre. Eso es lo que ha vuelto a hacer Al-Quaeda, una organización de asesinos que se respaldan en futuros paraísos que dudo mucho que existan. Tampoco creo que de existir estén reselvados para ellos.
En Argel han muerto en torno a 30 personas, más de cien continúan heridas como consecuencia de la explosción de cuatro coches bombas. Y los responsables aún se enorgullecen de su éxito reivindicando el atentado. Puede parecerles un gran triunfo así de inmediato, pero han llegado tarde, la época de las dinosaurios, de los canívales, de la sin razón en definitiva, está muy lejana, aunque algunos acontecimientos digan lo contrario
Para muchos resulta curioso que hoy 11 de abril haya tenido lugar este atentado porque recuerda a otros onces: el 11S y el 11M. Y sin embargo, hay algo tan distinto en ellos, al margen de que en éste último el número de victimas ha sido menor. La diferencia está en la cobertura mediática. Hoy no hay medios saturados, se accede con facilidad a toda la prensa digital, no hay interrupciones de programación... El mundo no se ha paralizado porque Argel, bueno Argel está en África.
Pero es igualmente un buen momento para reivindiacar la necesidad de convivir, de salir a la calle sin correr o esconderse, sin emplear la desconfianza sistemática como torpe sistema de protección.
El terrorismo, venga de donde venga, terminará desapareciendo porque cuando no hay una base sólida, fuerte, verdadera, los edificios se derrumban.

martes, 10 de abril de 2007

A todos los Tepindros

Tepindro hasta ahora no sabías nada de tu vida, ni quién eras, ni qué te trajo hasta mi. Nunca te había contado que perteneces a un mundo en el que la competencia es la base, un mundo en el que todos luchan por alcanzar sus objetivos, desechando lo que en otros tiempos fue la esencia. Un mundo que no se diferencia tanto al de los humanos, es más, creo que está inspirado en él.
Eres hijo de un invento y una ilusión. El primero sólo te engendró, yo he intentado enseñarte el resto, aunque no con mucho acierto. Sin embargo, he descubierto a tu lado una bonita aventura. Me siento orgullosa de lo poco que te he contado y de lo mucho que me queda por contarte. No hemos hablado quizá lo que necesitabas, pero no ha sido éste un buen momento para mi. En cambio, a partir de ahora vamos a charlar con más frecuencia, sin presión, sin prisas, sin fechas, ni límites.
Ahí va la verdad de tu origen Tepindro: naciste de un calentón, de un concurso, cuyo trofeo era lo suficiente goloso para dejarse las pestañas en el ordenador. Pero no ha podido ser, realmente no he podido arañar más tiempo a mi "apretada agenda". Por este motivo, y aunque sé que a esto aún le queda, quiero felicitar a todos tus Hermanos Tepindros por su constancia y su dedicación, también por su talento. De corazón felicidades. No olvides que compartes progenitor con ellos.
PD: Mención especial a Tepindrofobía, su último post me encanto, incluso me tocó la vena sensible.

miércoles, 21 de marzo de 2007

Faltan aniversarios


Ayer, 20 de marzo de 2007, se cumplieron 4 años desde que unos impresentables decidiesen "liberar a un país" (la foto muestra que tipo de liberación). Sin embargo, seguimos esperando que ésta se produzca. Irak continúa sumergido en una dictadura, la de la guerra. Mueren personas todos los días; en cada rincón amanecen niños huérfanos, viudas, personas que han perdido su vida, sus recuerdos, ¿eso es libertad?. No lo creo.

También en estos días se cumple otro aniversario, el de las Azores, la reunión en la que se planeó la salvación del petróleo de un país y se olvidó la liberación de sus ciudadanos.
Sadam Husseim está muerto, fue condenado por un crimen contra la Humanidad, era un asesino, no hay duda. Pero en Irak han muerto más de 600.000 iraquíes durante y después de la guerra, ¿dónde esta el responsable? Él también es un asesino.

Por cierto, buscando aniversarios no he encontrado por ningún sitio el de la liberación y el del fin de la guerra en Irak. Ojalá pronto se le ponga fecha, será el único que merezca la pena celebrar.

domingo, 18 de marzo de 2007

El futuro es nuestro

Hoy te quiero enseñar Tepindro un artículo que escribí para la Revista del Encuentro de Cuadrillas de mi pueblo, Nerpio. Tengo que reconocer que me siento muy orgullosa de él, ya que pongo de manifiesto lo que algunos saben y no quieren reconocer, y también porque algunos vecinos me han felicitado. Aunque de lo que más orgullosa me siento es de las criticas y casí insultos que sobre mí han derramado, eso me permite comprobar hasta que punto son importantes las palabras, las opiniones y las verdades. No menciono a nadie, no falto al respeto a ninguna persona, únicamente reprocho las conductas de algunos cargos públicos, que son representantes de un pueblo. Espero que te guste Tepindro:
No terminan de tomarnos en serio, somos los eslabones de una cadena que se rompió y nadie sabe donde comenzar a unir los pedazos. Nos agrupan dentro de términos genéricos, cargados de connotaciones peyorativas que han perdido el romanticismo de otros tiempos. Somos los jóvenes, los que no hemos hecho nada.
Siento mucho contradecirles, señores. Sí, somos los jóvenes, no hemos luchado en ningún conflicto, no estuvimos en Vietnam, ni en el Golfo y la Guerra Civil nos queda muy lejana. Pero gritamos no a la guerra cuando unos impresentables se disponían a jugar a pistoleros y vaqueros en un territorio que no era el suyo. No estuvimos en las calles cuando un tal Tejero, a golpe de pistola, hacía tambalearse una recién estrenada libertad. Sin embargo, alzamos las manos para pedir que soltaran a un desconocido Miguel Ángel Blanco, comprendimos qué era eso de ETA y aprendimos a gritar no al terrorismo. No metimos el sobre en las urnas para apoyar la Constitución del 78, pero hemos apoyado la igualdad de la mujer, los matrimonios homosexuales y el respeto a los inmigrantes. No hemos librado grandes batallas pero hemos aprendido a valorar la sangre derramada. No hemos estado en la historia porque la estamos escribiendo.
Somos la última generación que cree en lo que hace y hace lo que cree. Tenemos voz y voto y resulta interesante recordarlo para todos aquellos que andan despistados y creen que todavía vamos con calcetas y pantalones a media rodilla. Es justo que alguien nos escuche y te ha tocado a ti.
Hemos nacido en el lugar perfecto, en el momento idóneo, donde todas las batallas hablan de héroes y donde nadie sabe explicarnos muy bien por qué no se nos tiene en cuenta. Oímos a cada rato: “Si es que la juventud de hoy en día...”, “estos jóvenes sólo se mueven por lo que les interesa”, o la guinda; “ni tienen inquietudes, ni saben divertirse como los de antes”, frases repletas de ignorancia, que abogan por el discurso sencillo. El que comienza con un nosotros ya hemos hecho suficiente, lo que tenéis es porque otros se dejaron la piel para conseguirlo, y termina dando por sentado que pasamos de todo. Esto me provoca un cruce de pasiones que termina generando una soberana carcajada. Me rió de aquellos que desde sus sillones, nos hablan de las oportunidades que tenemos y que a cada rato despreciamos; me rió de aquellos que intentan menospreciarnos, para evitar que tomemos el relevo. ¡Qué somos jóvenes, lo que inevitablemente implica poca experiencia, no poca inteligencia!. Y para muestra un repaso rápido por la actualidad de este pueblo, al que digan lo que digan, queremos y respetamos. Desde la distancia de quien pasa la mayor parte del tiempo fuera, las cosas se ven con un extraño cristal de objetividad, que lucha por no reflejar un sentimiento más profundo y sincero de nostalgia. Recordando, me ha venido a la cabeza, la última vez que probaron a tomarnos el pelo. Intento fallido, todo sea dicho de paso. Corría el caluroso mes de agosto de..., ah del año pasado y unos y otros criticaban, con mayor o menor acierto, la elección de grupos para la Noche del Rock. La crítica se convirtió en un No a ese grupo. “¿Por qué?”, pues porque ummmmm, pues porque no, que para eso decidimos nosotros. De repente, un cambio de opinión. Demasiado tarde y demasiado trabajo que no sirvió para nada, otra vez será.
Ahora, que estoy nostálgica, recuerdo la primera excursión del cole, destino: El Plantón del Covacho, ese señor de boina grande y cuerpo robusto que se debate entre la vida y la muerte por la inoperancia de unos, la torpeza de otros y la ignorancia de todos. Realmente no es necesario buscar culpables, todos lo somos en el fondo, porque el que no habla apoya al que ordena. También me viene a la mente, la visita a las Pinturas Rupestres, acababan de ser nombradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Y Nerpio salía en la prensa. Vaya como ahora, sólo que por motivos distintos. En estos días, cercanos a las elecciones, los concejales denuncian en los periódicos lo que callan en los plenos. Ya se sabe que eso de posar en la foto siempre aumenta los galones, y cuando no se tienen no está de más que te los pongan. Pero vamos, que las verdades a medias, aunque verdades, encierran un sutil toque de mala leche que con las urnas a la vuelta de la esquina, huele a intento desesperado de ganar aunque sea un par de votos. ¡Uy, pero si los jóvenes somos tontos!. Tontos sí pero como hemos ido a la escuela, hemos aprendido a sumar dos más dos, y nos dan cuatro.
Curioso verdad, pero si continuamos sumando nos daremos cuenta que nuestros sobres son los que van a dar la victoria a unos o a otros, y nos continúan subestimando, ¿es o no para reírse?

viernes, 16 de marzo de 2007

La doble moral de los populares

Esto que te voy a contar Tepindro, ya lo debes saber, en tu mundo las noticias corren mucho más que en el mío. En cualquier caso, necesitaba alejarme de los hechos para que al menos la subjetividad no estuviese llena de mala leche. Estos días me he reencontrado con un sentimiento que permanecía dormido en mi: la vergüenza ajena. ¿Sabes lo qué es Tepindro?, es lo que te produce ver a un grupo de señores en traje de chaqueta mintiendo porque han hecho de la mentira su particular camino; es lo que te produce ver a unos cuantos políticos convocando una manifestación para defender la muerte de un asesino (sí, pero también de un persona). Y luego, tú que eres muy dada a hacer memoría, te das cuenta que estos señores son los mismos que se manifestaban a favor de las familias, en contra del aborto y de la eutanasia, porque la vida de las personas está por encima de todo. Y de repente descubres que no todas las vidas son valoradas igual, pero ese no es el tema.
Hace unos días le concedían a Iñaki de Juana Chao el segundo grado, lo que le permite cumplir el resto de su condena en su domicilio o en el hospital en caso de que fuera necesario (que de momento lo es), pero siempre con vigilancia policial. La condena responde a un delito de amenazas emitidas en dos artículos en el diario Gara: El Escudo y Gallizo. Hasta ahí la noticia, los hechos, lo único objetivo de lo que realmente ha ocurrido. El resto son especulaciones, mentiras y opiniones. Y ahí van las mias.
Ese individuo es un asesino, eso es algo indiscutible. Estuvo 18 años en prisión por participar en los asesinatos de 25 personas. Sí, es un asesino. Pero ha cumplido condena. Insuficiente, injusta, lamentable..., puede, pero eso lo decide la justicia, que aunque algunos lo olviden vivimos en un Estado de Derecho. Ahora sólo se le juzga por unos artículos de opinión amenazantes o no, de los que he creído necesario rescatar un fragmento:

No necesito ser adivino para poder chillar con toda fuerza y convicción, en una
expresión políticamente incorrecta: ¡La tenéis clara! Iros a la mierda con todo
lo anterior porque no vais a ganar. ¿O es que todavía no os habéis dado cuenta
de que tenemos un escudo invulnerable que no es otro que la razón?

No he podido resistirme al leerlo, porque me llama poderosamente la atención que exprese con absoluta rotundidad que ganarán porque tienen con ellos la razón, ¿sorprende verdad Tepindro?. Ese es lo que les mueve, que creen tener la razón y desconocen que tener razón, gozar verdaderamente de razón implica necesariamente respetar la vida del resto de individuos que también tienen sus razones. Definitivamente ellos no tienen razón.
Sin embargo, debo de reconocer que me alegra la frialdad del Gobierno a la hora de tomar esta decisión. Como seres humanos podemos no entender que un asesino este en la calle, pero como políticos, como representantes y responsables de un país hay que ir más allá y medir consecuencias. Rubalcaba ha tomado la decisión correcta (entre todos la han tomado aunque él haya dado la cara) y eso es digno de elogio.
Por un momento, he imaginado que de Juana moría en prisión, y era convertido en un héroe, en el mártir que nunca han tenido. Y de repente tenían una nueva razón (mala como todas las suyas) para seguir matando.
Resulta curioso los escrúpulos de los populares cuando se trata de un asesino. Entendiendo como tal tanto al que dispara como al que ordena que se apriete el gatillo. ¿NO? De repente vuelvo a hacer memoria y recuerdo que son íntimos de Bush.
¡Ah! sólo en 2006 murieron cerca de 35.000 civiles en Irak a causa de la guerra, según la ONU.

Te echaba de menos Tepindro.

Hola Tepindro, desde hace algunos días te tengo abandonado y no sabes cuanto lo siento. Realmente no hay ninguna justificación pero sí una razón: tú sólo funcionas desde Internet y yo en Murcia no tengo. Ya sé, puedo ir a un ciber, pero créeme se sale de mi presupuesto, aunque algunos insistan en que no cuesta nada.
Pero dejemos de hablar de eso, te tengo que contar tantas cosas. No imaginas lo que he necesitado contarle a alguien la rabia que en estos días me invade.

jueves, 1 de marzo de 2007

Querido Tepindro:

Como lo prometido es deuda, te enseño mi pueblo. ¿Te gusta Tepindro? Es una fotografia del centro del pueblo, otro día te muestro otras, ¿ok?

lunes, 26 de febrero de 2007

Querido Tepindro:

Hoy estoy algo triste, me acuerdo de mi pueblo. ¿Recuerdas Tepindro que te hablé de él?, seguro que sí. Hace unos meses escribí en una revista un artículo. Ahora quiero que tú también lo tengas. Que lo guardes Tepindro, como guardan los piratas sus tesoros y quiero que me lo leas cuando veas que la nostalgia me invade, como ocurre en este momento.
Te conozco tanto que he terminado por no conocerte nada. Te escuchaba de niña susurrarme en la cuna, no sé cómo, pero el coco pensando en ti siempre fue menos malo. Cuando crecí te descubrí envuelto de nieve en invierno y de bullicio en verano. Los otoños a tu lado siempre fueron eternos y las primaveras eran el resultado de una extraña mezcla, que nunca supe muy bien a que olía. Seguí creciendo, y al igual que para mí, el tiempo pasó por ti. Me hice mujer y entonces te descubrí así cómo eres en realidad; mitad sueño de una tarde de verano, mitad frustración de una mañana de invierno. No imaginas Tepindro los inviernos en mi pueblo.
Yo, cómo tantos otros, te he ido conociendo al tiempo que recorría tu cuerpo y bebía de ti, mientras pérdida en tus rincones aguardaba silenciosa y atenta a cualquier extraño. Aún había algo de aquella niña que miraba con la boca abierta la primera mariposa de mayo. La mariposa se fue en septiembre y la niña... la niña vuelve cuando te tiene cerca. ¿Tú también habrás sido niño Tepindro y tendrás recuerdos?.
He comido de ti, mi mano ha recorrido los secretos más profundos de tu ser, he oído tu rugir y tu calma. He llegado tan lejos..., hasta poner mi mano sobre tu corazón para comprobar que había pulso. Y lo había, pero muy lento. Tus secretos han dejado de serlo, y ya hay quién lo encuentra rentable; tu rugir se torna en tempestad y la calma, esa ya no existe. En un tiempo lo fuiste todo para aquellos niños que se contentaban con correr por tus calles y bañarse en tus aguas. Pero ellos son hoy mujeres y hombres que te anhelan, que te extrañan y que vuelven siempre que pueden a ti, buscando esa inocencia que a tú lado descubrieron. Te bautizaron con el nombre mágico de “El Pueblo”, nunca te quejaste. Ni aún hoy, cuando llenan a cada rato tu cuerpo de basura y mentiras, de promesas rotas y de compromisos desquebrajados, y ni siquiera así replicas. Has hecho de tú vida la nuestra y nadie se acuerda. Nerpio, ese es tu verdadero nombre, el que se exhibe con orgullo cuando uno se encuentra alejado de tus tierras y ante el muy frecuente ¿Qué?, se repite tu nombre una octava más alta, porque no entendemos que no te conozcan, porque sencillamente quienes en ti hemos crecido y seguimos haciéndolo, nos resistimos a creer que en otros lugares exista vida. Se llama Nerpio, Tepindro, mi pueblo se llama Nerpio, un nombre raro como el tuyo pero preciso, ¿eh? Tepindro.
Dicen los quejicas que tu entrada está envuelta por un sin fin de eslabones que a modo de carretera dificultan el recorrido ¡Qué sabrán ellos el lugar dónde el universo esconde sus tesoros!. Han pasado tantos inviernos y tantos veranos, que una no sabe muy bien cómo repartir los recuerdos. Sin embargo, hay algo que permanece en la parte de niña que vive en la de mujer, un extraño sentimiento de nostalgia y prisa por volver cuando los kilómetros nos separan de ti.
En Agosto te engalanas, sacas tus mejores ropas y ofreces tu mejor sonrisa. La ocasión lo merece.
Tepindro, el verano que viene invitas a tus amigos a mi pueblo. Tus calles vibran con el calor de tus gentes, de las gentes. Dice la canción y no va mal encaminada, “que todo el que viene en Nerpio se queda”. Ojala fuese así de sencillo, pensarán muchos, pero que no se lleven a engaño, tú siempre te quedas, habitas en los corazones de aquellos que te recuerdan, también en los de aquellos que siendo “extranjeros” viven contando los días para regresar a ti. Duermes en las lágrimas del que se va y en la quimera del que se queda. No hay nada más hermoso que el recuerdo y la ilusión. El recuerdo de los veranos en los que aún éramos niños y correr y gritar era una obligación. La ilusión de ver un mañana lleno de niños que tienen el deber y la obligación de gritar muy fuerte, hasta que se les escuche. Pasas lista y vuelves la página, las sonrisas de algunos esconden las de tantos otros que corrieron tus calles y que siendo niños aprendieron a quererte. Se fueron y vinieron otros, que también cubren tus caminos y que han descubierto el valor del compromiso más sincero, el que se da sin nada a cambio.
Antes fuimos niños, alegados de todo deber que no estuviese sujeto a la diversión, hoy hemos aprendido, aunque algunos no lo crean, a respetarte, a mirar por ti, hemos aprendido a quererte porque otros ya habían grabado con sangre y sudor las huellas en el camino; a todos ellos gracias. Al resto..., no saben lo que se pierden.
Esos niños que un día jugaban con los cuernos de las vacas a fingir encierros son los mismos que hoy corren delante de los bichos negros; esos niños que gritaban, son los que ahora reclaman, anhelan y... siguen gritando.
Gritamos para que nos escuchen Tepindro.
Por ti que nos has visto avanzar y retroceder, que siempre nos has tendido los brazos abiertos cuando hemos buscado cobijo o un rato de consuelo alejados del mundanal ruido. Por nosotros, los jóvenes, que hemos aprendido de aquellos que han querido enseñarnos. Y por vosotros, Nerpian@s, para que juntos sigamos descubriendo a cada instante la magia y el embrujo que nuestro pueblo encierra. ¿Qué no? Entonces ¿Cómo se explica que cada año volvamos sabiendo que siempre serán las mismas caras las que vamos a encontrar? Saben cómo se explica: recordando a aquel niño que creció amando estas tierras y que no sabe vivir sino se alimenta de ellas.
¿Te ha gustado Tepindro?, un día de estos te voy a enseñar una foto.

sábado, 24 de febrero de 2007

Querido Tepindro:



“Espero confiártelo todo como hasta ahora no he podido hacer con nadie; confió, también, en que tú serás para mi un gran sostén”, así comenzaba Ana Frank su diario y así quiero yo comenzar estas cartas dirigidas a nadie, que se almacenarán en una caja debajo de mi cama. Tepindro, tú serás Kitty la eterna confidente de la niña que convirtió la odisea de la II Guerra Mundial en una aventura con un triste final. Ella llamó Kitty a su consuelo, a su dolor, a su angustia, a su esperanza y yo te he llamado Tepindro, sí Tepindro, que no significa nada pero al tiempo lo será todo. Tengo la necesidad de contar lo que pienso, lo que siento, lo que he vivido y tú Tepindro serás mi voz en este mundo.
La primera vez que pisé suelo desconocido y dormí alejada del beso de buenas noches de mi madre era una niña y aquello un juego. Después crecí y comprendí que esa iba a ser la realidad, la mía y la de otros muchos, que no tienen la suerte (o la desgracia, no lo sé) de vivir siempre arropados por las faldas de una madre que te hace la cama y te da la comida. Estoy lejos de mi tierra, de los lugares que alguna vez me enseñaron a vivir, y estoy lejos de los míos, de las personas que alguna vez me enseñaron a volar. Alejada de todo eso desde los 13 años he aprendido a valorar lo que no se tiene y a extrañar lo que no va a volver, pero también he aprendido a ser feliz así. Mis padres, ¿tú tienes padres Tepindro?, seguro que sí porque todos los tenemos, pues mis padres me enseñaron desde pequeña a luchar por lo que quiero y a no tener miedo a lo desconocido, por eso cuando siendo niña tuve que dejar mi pueblo, Nerpio, ¿conoces mi pueblo Tepindro?, es el lugar más bonito que nunca he visto, cuando tuve que dejarlo sentí angustia pero también alivio porque iba a estudiar, a conocer gente y sitios nuevos, y no me puedo quejar de la experiencia. Hoy tengo 20 años y vuelvo siempre que puedo, ahora te escribo desde aquí, algún día Tepindro te voy a traer a que lo veas, seguro que te gusta.